domingo, 16 de septiembre de 2012



                                         DIGAMOS
 

                                                             Ayer fue yesterday      
                                                             para buenos colonos
                                                             mas por fortuna nuestro
                                                             mañana no es tomorrow
    
                                                             Tengo un mañana que es mio
                                                             y un mañana que es de todos
                                                             el mío acaba mañana
                                                             pero sobrevive el otro.

 

 

domingo, 9 de septiembre de 2012

Cultura Libre: 10 claves para leer a Lawrence Lessig

Cultura Libre de Lawrence Lessig


Con una claridad (y honestidad) inusual en un abogado, Lessig expone paso a paso por qué nuestra cultura está amenazada por la legislación y los intereses comerciales, presentando ejemplos asombrosos (¿sabían que mostrar 4 segundos de Los Simpsons con fines educacionales cuesta 10.000 dólares?) e incluso proponiendo una línea de acción para contrarrestarlo.

Paradójicamente, esta sencillez también me reveló la temible complejidad del problema. Porque si luego de 3 años interactuando con los chicos de Derechos Digitales yo aún no era capaz de comprender a cabalidad su magnitud, ¿cómo podemos explicarlo a esa gran mayoría de personas que ni siquiera saben qué significa el término copyright??

Desde luego la primera recomendación es leer el libro -que pueden descargar libremente o disfrutar en papel por muy poco dinero- pero para quienes no estén seguros si vale la pena, aquí va mi versión ultrarresumida de sus 10 puntos principales:


1. Cada uso? una copia

Antiguamente, cuando hablábamos de contenidos como libros, música o películas, nadie se preocupaba mucho del uso que les dieras.

Claro, salvo que se te ocurriera hacer copias para venderlas en la cuneta (lo que además era caro y engorroso), nadie iba a recriminarte por recopilar poemas en un cuaderno, compartir un disco con un amigo o vender una película que ya no te gustaba.

Pero con la llegada de las tecnologías digitales el panorama cambió radicalmente: ahora cada uso ES una copia. Eso significa que si pegas la noticia de un diario en tu blog, envias una canción por correo a un amigo, o incluso pasas el último CD que compraste a tu reproductor de MP3, estás haciendo algo ilegal.

¡Si hasta cuando visitas una página web estás haciendo una copia!. La frontera entre usos legítimos e ilícitos es cada vez más difusa.


2. Tecnología: ¿oportunidades o amenazas?

En vez de analizar los cambios que introduce la tecnología como un todo, la industria de contenidos se ha centrado en tildarla de amenaza, tratando de establecer una relación directa entre ella y sus pérdidas económicas.

Sólo demos un vistazo a la más satanizada de todas: las redes de intercambio de archivos (P2P), como eMule o BitTorrent. Según Lessig, podemos dividir sus usuarios en 4 tipos:
A) Usuarios que, pudiendo pagar, descargan discos o películas gratuitamente. Dañinos.
B) Usuarios buscando recomendaciones o que quieren ?probar antes de comprar?. Beneficiosos.
C) Usuarios buscando contenidos antiguos o que ya no se encuentran en el comercio. Inocuos.
D) Usuarios buscando contenidos libres o sin derechos de autor. Inocuos.

La pregunta -que hasta ahora la industria no ha abordado con seriedad- es en qué proporción existe cada tipo de usuario y si eventualmente los daños de los usuarios A podrían anularse (o superarse) por los beneficios de los usuarios B.


3. La sobreprotección daña el ecosistema cultural

En un ?ecosistema? cultural, las obras creativas reciben protección por un lapso suficiente para beneficiar a su autor y luego pasan al dominio público para beneficiar a la sociedad. Allí nuevos autores se inspiran en las obras ?liberadas? para crear nuevas obras o versiones, reproduciendo el ciclo.

Disney es un ejemplo de sus beneficios. Sus primeras cintas animaron clásicos que estaban en el dominio público y el propio ratón Mickey nació en un corto (Steamboat Willie) que parodiaba una exitosa película muda de la época (Steamboat Bill, Jr), que a su vez se basaba en una canción (Steamboat Bill).

Por desgracia las legislaciones están ampliando en exceso tanto los plazos (pasamos de 14 a casi 100 años) como su rango de protección, afectando este ecosistema: desde 1930 ninguna obra ha pasado al dominio público, e incorporar apenas un breve extracto de una obra exige un complejo proceso de adquisición de derechos.

¿La ironía? Disney es ahora uno de los principales grupos de presión para seguir imponiendo estas leyes.


4. Los grandes medios nacieron de una forma de ?piratería?

Si examinamos el surgimiento de las principales industrias de contenidos en EEUU, veremos que la mayoría debe su actual prosperidad a alguna forma de ?piratería?:
A) CINE: Las primeras productoras fílmicas huyeron (literalmente) a California y fundaron Hollywood para escapar del férreo control de patentes de Thomas Edison por el uso del cinematógrafo.
Uno de los instigadores de esta escapatoria fue William Fox? cuya empresa hoy es una de las mayores perseguidoras de ?piratas?.
B) DISCOGRÁFICAS: Aprovechando un vacío legal, los primeros sellos de EEUU vendían sus grabaciones de música sin pagar derecho alguno a los compositores, ya que la ley sólo exigía pago por partituras e interpretación pública.
El Congreso pronto enmendó el error, pero en vez de dejar a cada compositor fijar el precio de sus creaciones (como sucede con los libros o el cine), creó una licencia fija, lo que hasta hoy subsidia indirectamente la industria discográfica estadounidense.
C) RADIO: Gracias a la efectividad de su grupo de presión en el Congreso (lobby), las radios estadounidenses sólo pagan la misma licencia fija al compositor que las discográficas, pero no pagan un peso a los artistas que interpretan las canciones.
Lo curioso es que el mismo grupo logró que en 1995 el Congreso SÍ aprobara este cobro para las radios por Internet, obstaculizando por secretaría esta emergente forma de competencia.
D) TV CABLE: Cuando el cable surgió en EEUU a fines de los años 40, se generó una gran polémica debido a que estas compañías no sólo tomaban sin pagar las emisiones de TV con derecho de autor? sino que además lucraban con ellas.
Para cuando el Congreso finalmente fijó una tarifa de acceso, las empresas de cable ya se habían consolidado como corporaciones propias tras 30 años de ?pirateo?.

Por cierto, Lessig no enumera estos casos para ?empatar? a la industria con los piratas, sino para demostrar como en muchos casos es necesario recurrir a las creaciones de otros para fomentar nuevos emprendimientos.

5. Copyright: La cultura en estado de sitio

Usualmente, se piensa que quienes apoyan la cultura libre están contra la protección de los derechos del autor de una obra -el copyright- y pretenden que los libros, música y películas se regalen, mientras los artistas comen piedras. Nada más equivocado.

En su libro, Lessig destaca la necesidad del copyright para proteger a los autores. El problema es que los cambios legales y tecnológicos de las últimas décadas lo han convertido en una herramienta que, más que proteger, enclaustra la cultura:

A) Plazos: Los iniciales 14 años de protección para una obra se han ampliado (por presiones comerciales) hasta alcanzar 95 años para empresas, y la vida del autor + 70 años para personas naturales.
(La legislación chilena también ha ido ampliando sus plazos para equiparar la legislación estadounidense, debido a los acuerdos de libre comercio).

B) Campo de Acción: Antes, el copyright sólo protegía a las obras contra copias no autorizadas. Luego y en forma progresiva, su campo de acción se amplió a las obras derivadas, citas, parodias, extractos, versiones, interpretaciones o cualquier manifestación que se base (holgadamente) en una obra protegida.

C) Control Tecnológico: Antes, una vez vendido el libro, disco o cinta, la industria tenía poco control sobre lo que hacías con ellos. Ahora, todo computador conectado a la red puede registrar (y transmitir) cuántas veces lo usaste, cómo lo usaste, en qué momento, por cuánto tiempo, desde qué lugar o si realizaste copias.

D) Concentración: Lo más preocupante sin embargo es que, en un 95%, estos mecanismos no benefician directamente a los autores, sino al 5% de grandes editoriales, discográficas o estudios de cine que lucran con sus obras.

Citando a Lessig, ?nunca en la historia menos gente ha tenido tanto poder para controlar la cultura?.

6. Consecuencias

¿Y qué tiene de malo esta sobreprotección? Además de afectar negativamente el ecosistema cultural como explicamos en el punto 3, un copyright desmesurado tiene 3 consecuencias que ya estamos sufriendo:

A) Inhibe la creatividad: Con entramados legales complejos y onerosos; el compartir, basarse, mezclar o archivar obras que ya han sido creadas es una actividad demasiado riesgosa para quien no puede costear un bufete de abogados.
En EEUU, incluso las pequeñas películas independientes necesitan contratar pólizas de seguro contra potenciales demandas por violaciones inadvertidas al copyright. En otro caso, crear un simple documental sobre la vida de Clint Eastwood requirió 1 año de trabajo y un presupuesto apoteósico sólo para obtener los derechos de varios clips de 10 segundos donde aparecía el actor.

B) Inhibe la innovación: En un sistema que castiga duramente cualquier violación al derecho de autor (la RIAA demanda 150.000 dólares por cada canción ?pirateada?), los emprendedores e inversionistas temen crear nuevas tecnologías que puedan provocar la furia de las corporaciones.
Vean 2 ejemplos:

MP3.com fue condenada a pagar 118 millones de dólares por ?violar? los derechos de las discográficas al lanzar un servicio de validación de música en línea, donde un CD original te permitía acceder a tus canciones desde cualquier PC con Internet. No sólo eso: los sellos demandaron a los abogados del sitio por ?negligencia? en no advertir a su cliente y, en el caso de Napster, al inversionista que proporcionó capital de riesgo.

En otro caso, un alumno del Instituto Politécnico de Rensselaer (RPI) mejoró el motor de búsquedas de la red interna de su casa del establecimiento para hacerlo más eficiente. Como esto también ?mejoró? el intercambio de música que hacían otros? la RIAA lo demandó y acabó pagando todos sus ahorros (12.000 dólares) como parte de un acuerdo extrajudicial.

¿El mensaje? No te acerques a (el modelo de negocios de) la industria, o te pesará.

C) Criminaliza a los ciudadanos: Según datos de la RIAA, ya en 2002 el 20% de los estadounidenses había usado redes P2P. En Chile, si pasas un CD a tu reproductor de MP3 estás haciendo un uso ilegal.

Para la industria, todas esas personas son -o somos- delincuentes.

?Cuanto más a menudo y de forma más repetida tenemos la experiencia de violar una ley, menos la respetamos? dice Lessig. ?La pregunta entonces no es cómo endurecer más aún las leyes, sino cuestionarse si éstas realmente sirven a los fines justos del copyright?.

7. Dominio Público: ¿Por qué es importante?

Entre 1998 y 2003, Lessig representó a un ciudadano cuya idea de crear un archivo público en línea de literatura clásica estadounidense, se vio frustrada por la última extensión en los plazos de copyright aprobada por el congreso de EEUU.

Reclamaron su inconstitucionalidad a un tribunal estatal y a la Corte Suprema.

Perdieron ambas instancias.

Ahora, sin mencionar la presión política que ejerció la industria, Lessig realiza una fuerte autocrítica al señalar su gran error: no destacar ante la Corte la importancia del dominio público y cómo se está amenazando la cultura.

Esta debe ser la premisa de todos quienes apoyan un sistema de cultura libre. Las razones ya se han expuesto pero queda una más?

8. Herramientas Democráticas

Comenzando el libro, Lessig presenta ejemplos sobre cómo un entorno que fomenta la creatividad es imprescindible no sólo para la cultura, sino también para la democracia. Vean 2 casos:

Durante sus primeros años, la fotografía fue una disciplina limitada a algunas empresas y profesionales debido a que sus requerimientos técnicos tan caros como complejos. Sin embargo, tras la invención de los rollos de película, ésta se volvió asequible y por tanto una actividad corriente que cualquier persona podía disfrutar.

Luego tenemos a los medios, que durante décadas concentraron el acceso a la información. Entonces llegan los blogs, e inician una revolución donde cualquier persona puede comunicar sus análisis, opiniones e ideas a nivel global, en muchos casos, influyendo la propia pauta de los medios.

En ambos casos la tecnología ha posibilitado la ?democratización? de una herramienta fuera de los grandes consorcios, permitiendo a la gente expresarse de forma mucho más sencilla, o generar instancias de debate.

9. Nosotros: ¿qué podemos hacer?

En un mundo donde un 5% de las empresas se beneficia de las leyes de derecho de autor mientras un 95% permanece marginado (u olvidado), el primer paso es que esos ciudadanos tomen el control de sus propias obras, reconstruyendo el dominio público.

Para ello, Lessig creó el sistema de licencias Creative Commons. Estas son un complemento -no un sustituto- al copyright donde, en vez de encerrarse con un ?todos los derechos reservados?, el autor establece sólo ?algunos derechos reservados?.

Usando una licencia Creative Commons en su obra, el autor ofrece (de antemano) permiso para que ésta se use en los términos que él mismo especifique, favoreciendo su difusión.

Por ejemplo, mi bitácora permite que utilices cualquiera de sus artículos, siempre y cuando me menciones como autor y no lucres con ellos.

Y sí, Creative Commons está adaptada a la legislación chilena (y a la de muchos otros países), gracias a la Universidad de Chile y los chicos de Derechos Digitales :)

10. Legisladores: ¿Qué deben hacer ellos?

Aunque como ciudadanos (y autores) hagamos nuestra parte, se requiere que los legisladores de cada país modifiquen la ley en 5 sentidos:
A) Formalidades: Suena a burocracia, pero en vez del sistema de protección automático que tenemos hoy, cada obra debiera exigir un registro formal para asegurar su copyright. Así, no sólo se sabría con certeza qué obras están o no protegidas, sino que se podría ubicar fácilmente a los autores para obtener los derechos.
B) Plazos más cortos: Es imperativo reducir los plazos de los derechos de autor. Lessig propone un máximo de 75 años, siempre y cuando el titular vivo -no el representante de una empresa- lo renueve cada 5 años.
C) Especificar usos: Así como es necesario saber qué obras están protegidas y por cuánto tiempo, también es necesario qué es exactamente lo que se protege. Por ello es interesante la política del ?uso justo?, donde se permite utilizar material protegido sin consentimiento del autor para fines educativos, informativos o sin fines de lucro, entre otros.
(En Chile esto se conoce como ?excepciones? al derecho de autor y actualmente se está discutiendo en la nueva ley de propiedad intelectual).

D) Replantear el "negocio" de la música: La industria discográfica ha sido una de las más agresivas en imponer sus derechos de autor, atacando o sembrando incertidumbre sobre lo que podrían ser usos justos.
Lessig plantea que la legislación debe proteger el intercambio de archivos cuando no tiene copyright, permitir el intercambio de material que ya no se encuentra en el comercio (propone el pago de una tasa fija) y que se ofrezcan compensaciones a las discográficas sólo cuando muestren evidencias de daño real (versus beneficios), por causa de las redes P2P.

E) Menos abogados: Es curioso leer que un abogado ataque a su propio gremio, pero Lessig es consciente que, en el actual sistema de derechos de autor donde toda obra requiere abogados para obtener o garantizar derechos, la cultura se ve entrampada por razones burocráticas y económicas.
La legislación debe garantizar un sistema expedito donde los abogados sólo sean necesarios en los litigios? no en cada una de las acciones relacionadas con el derecho de autor.
(Creative Commons es un excelente ejemplo de esto).

Cultura libre en español
http://cyber.law.harvard.edu/blogs/gems/ion/Culturalibre.pdf 

Licencias para Mezclar. Elogios del plagio: Rima, Cita, Apropiación, Saqueo y Simulaciones


Las operaciones duchampianas fueron reconocidas como artísticas, solamente después de que el discurso institucional del arte fijo las coordenadas en las cuales, se reconoce que el autor material e intelectual de un objeto artístico podían no ser el mismo, partiendo de la idea de que el arte no está constituido únicamente por su patrimonio objetual. El gran legado duchampiano fue el de expandir los límites de la  institución arte, hasta el punto de aceptar y autorizar esa anarquía onomástica, que permite hoy incluir una vasta producción artística relacionada con el trafico de la autoría. 

 

 

Clase 1 del curso “Arte y cultura en circulación. Introducción al derecho de autor y las licencias libres”
Ejercicio Nº 1
1
Fórmula medicinal
Copyright
2
Título de una novela
Copyright
3
Un ensayo sociológico producido por un docente en la UBA
Dominio publico
4
Registro y publicación en un disco de un concierto de León Gieco
Derechos de productor fonográfic
5
Plantas con un carácter particular, desarrolladas por un fitomejorador en un laboratorio
Patentes
6
Emisión televisiva
Derechos del radiodifusor
7
Fórmula de la Coca Cola
Secretos industriales
8
Programa de computadora (fuente y objeto)
Copyright
9
El color magenta
Dominio Público
10
Poema de un autor fallecido en 1930
Dominio Público
11
Un algoritmo matemático
Dominio Público
12
Logo, colores identificatorios y nombre de una empresa
Derecho a la imagen
13
Fotografía de un paisaje
Derechos de Imagen
14
Argumento de una telenovela
Copyright
15
Queso Parmessano
Dominio Público
16
Coreografía de danza moderna
Derecho de interprete
17
Receta del locro
Dominio Público
18
La Floralis Genérica (Escultura en el espacio público)
Copyright
19
Una canción de Atahualpa Yupanqui editada por Sony BMG, cantada por Mercedes Sosa.
Derechos de productor fonográfico (conexos)
Los interpretes paga los derechos  para poder interpretar una canción que no le es propia.
20
Una noticia de un diario
Copyright
La noticia posee un autor-periodista, que sería su ‘autor intelectual’, o si no está firmada, pertenece al diario. El diario posee los derechos comerciales de las notas que publica.
21
La foto de Messi con el diputado Olmedo
Derecho radiodifusor
22
El gen de la semilla de soja resistente al glifosato.
Patente
Fue desarrollada por una universidad pública pero financiada por una empresa privada. Esta empresa, la patentó.

   


¿Cuáles creen que han sido los cambios fundamentales en la relación entre autor/editor con el advenimiento de Internet? ¿Creen que el modelo del derecho de autor tradicional está en crisis? ¿Por qué?


 No tengo respuestas para estas preguntas pero.

A partir de todo lo visto, me interesa hacer una serie de conexiones importantes con la obra de Marshall McLuhan, Comprender los medios de comunicación. Quiero enlazar con ella los aspectos prometedores del pensamiento de Benjamin, sin perder de vista los de orden crítico. Por un lado, me interesa examinar la potencialidad del cambio en nuestra subjetividad que se gesta con los nuevos medios tecnologicos. Esto implicará también ver el cambio en nuestra relación con los objetos y, por supuesto, en nuestro relaciones con los demás. En otras palabras quiero ver qué se puede sacar de positivo de la aproximación más bien crítica de Benjamin. Finalmente, quiero ver cómo quedan el arte y el artista después de examinar estas ideas.

“En una cultura como la nuestra, con una larga tradición de fraccionar y dividir para controlar, puede ser un choque que le recuerden a uno que, operativa y prácticamente, el medio es el mensaje. Esto significa simplemente que las consecuencias individuales y sociales de cualquier medio, es decir, de cualquiera de nuestras extensiones, resultan de la nueva escala que introduce en nuestros asuntos cualquier extensión o tecnología nueva”.

 Quizá decir que se trata de una cultura con una suerte de tradición por el control sea una afirmación gruesa, pero no quiero detenerme en ese detalle. Lo que interesa aquí es la tesis con la que se le contrapone: el medio es el mensaje. Esta idea es muy fina, simple y a la vez compleja. Lo que aquí supone nuestro autor es que la escisión entre forma y contenido, el medio y el mensaje que en él se manifiesta, es inconducente. El modo de presentación de algo configura ya el modo en que ese algo es comprendido a tal punto que son indiferenciables.  La cuestión radica en dejar de ver a los medios de comunicación como meros vehículos de contenidos, como pensaba Locke del lenguaje, por ejemplo, y empezar a verlos como extensiones nuestras, como nuevos modos de asimilar el mundo. Así, los nuevos medios constituyen transiciones profundas en nuestra forma de estar en el mundo y de aprehenderlo. Estas ideas de McLuhan nos deberían conectar nuevamente con la problemática tratada por Benjamin. Mi impresión es que él empezaba a percibir de cierto modo este nivel de la reflexión, a ello he hecho referencia varias veces cuando hablaba de menciones sugerentes pero poco desarrolladas. Creo que Benjamin, como he dicho, tiene una posición ambigua con los nuevos medios y con la técnica moderna, ve en ellos potencialidades que, sin embargo, la fantasmagoría oculta. Sin embargo, sabe que hay una dimensión de tránsito con estas nuevas tecnologías, que se está configurando, en cierto sentido, una nueva humanidad. El problema con él es que, por las condiciones de la época, pone el énfasis en la parte negativa del proceso. Lo que hace McLuhan es analizar su potencial revolucionario, pero de modo positivo. No se concentrará ya en pensar si quizá el cine u otros medios pueden ser útiles para la crítica social; la revolución que él identifica yace en el modo en que estos pueden reestructurar nuestra experiencia del mundo. Como se ve, estamos ante un motivo claramente benjaminiano, aunque revitalizado por el ojo de McLuhan.
Un ejemplo que le gusta a McLuhan es el de la aparición de la imprenta. Esta fue una tecnología que cambió para siempre el mundo medieval en que vivía la Europa de la época. Como sabemos se trató de un proceso de grandes dimensiones que terminó por cambiar a la larga el rostro de la humanidad toda. Como catalizador de procesos sociales, la imprenta permitió, entre muchas otras cosas, un notorio descentramiento del poder, una postura crítica ante la posesión de la verdad y la posibilidad de afianzar al individuo como entidad independiente de la colectividad. Ahora, como toda promesa, esta también implicó dificultades relativas al desmembramiento social, un individualismo exacerbado, la insubordinación y su contraparte: su uso como instrumento de uniformización, de igualación de las masas. Tensiones, todo nuevo medio trae mensajes nuevos que subvierten el orden y nos exponen ante posibilidades enormes y enormes conflictos. Es más, una de las características de la modernidad es precisamente la conciencia de la duplicidad de la tecnología: avanace y destrucción este pensamiento en lo que se a convertido en la era del internet y los nuevos medios. Aquí nos enfrenta al desolador panorama actual: las nuevas tecnologías parecen hbaer adquirido un poder sobre la sociedad que le es aterrador puesto que todo está vigilado por esta nueva tecnología, que, en oposición al ideal de libertad, ha vuelto a encarcelar al hombre dentro de nuevas formas de poder.Esto es, que la ciencia y la tecnología se han desviado de su primer propósito( así como lo hizo en Hiroshima) que era el supuesto progreso, para volverse contra el hombre.

 "Algo está flotando entre nosotros que parece un "ciberculto". Debemos saber que las nuevas tecnologías de conocimiento sólo promoverían la democracia si, y solamente si, nos oponemos desde el principio a la   caricatura de la sociedad global que es tramada para nosotros desde las grandes empresas multinacionales lanzándose a sí mismas, en una marcha peligrosa, a las autopistas de la información".

Para:

RIP! A remix manifesto - Documental sobre propiedad intelectual - Resumen del planteamiento



                                   «RIP! A remix manifesto» es un documental (publicado bajo licencia Creative Commons de tipo Atribución-NoComercial-CompartirIgual) que profundiza en las problemáticas actuales existentes del copyRIGHT y las nuevas propuestas copyLEFT acerca de las limitaciones de la legislación actual sobre propiedad intelectual en nuestra ya sólidamente cimentada sociedad de la información.

 Páginas oficiales:
http://ripremix.com
http://films.nfb.ca/rip-a-remix-manifesto/

Trailer:
http://www.youtube.com/watch?v=uu-N6UVMcqc (VOSI)

Información adicional:
http://es.wikipedia.org/wiki/RIP!:_A_Remix_Manifesto (español)
http://en.wikipedia.org/wiki/RiP!:_A_Remix_Manifesto (inglés)

Descarga del documental completo en VOSE:
http://www.archive.org/details/RipARemixManifestoes
(SATrip Xvid del canal argentino I.Sat
)









 

domingo, 2 de septiembre de 2012

Joan Brossa


Curso online abierto y gratuito “Arte y cultura en circulación: Introducción al derecho de autor y las licencias libres”

Presentación
En este curso vamos a hablar sobre el derecho a crear y compartir en libertad en la red, que hoy está en tensión con las legislaciones vigentes sobre propiedad intelectual en nuestros países. Aprenderemos sobre el derecho de autor, cómo funciona y para qué sirve. Luego vamos a repasar distintas alternativas al copyright que permiten crear conocimiento y cultura colaborativamente y vamos a aprender a usarlas. Finalmente, vamos a conocer nuevos modelos de producción de cultura y conocimiento sostenibles que trabajan a partir de este tipo de licencias.
Se trata de un curso online del que puedes participar desde cualquier lugar del mundo.
Todas las actividades del curso son gratuitas y abiertas y se realizan en paralelo al recorrido del LibreBus Cono Sur 2012. A su paso por Montevideo, realizaremos una actividad presencial que será transmitida por streaming.
El curso es organizado por Ártica – Centro Cultural 2.0 y Creative Commons Argentina.

Orientado a: artistas y creadores, organizaciones y gestores culturales, centros de cultura locales y barriales, medios comunitarios, militantes, estudiantes, educadores y todas las personas interesadas en la circulación de cultura y conocimiento.

Fecha: del 3 de septiembre al 15 de octubre de 2012.

Duración y carga horaria: el curso tendrá una duración de 6 semanas. La carga horaria aproximada será de 20 hs.

Temas
Módulo 1 – Derecho de autor: ¿qué es y cómo funciona?
- Introducción al derecho de autor, derechos morales y derechos patrimoniales
- Interpretar las diferentes teorías que sustentan el derecho de autor
- Detalles relevantes de las leyes de propiedad intelectual de Argentina, Brasil, Chile y Uruguay (plazos, excepciones, dominio público, registro, etc.)
- Brevísima introducción al marco jurídico internacional (OMPI, OMC)
Módulo 2 – Licencias libres como alternativa al copyright: cómo usarlas
- Licencias libres y construcción colaborativa de conocimiento: copyleft, sistema Creative Commons y sus variantes
- La elección de una licencia como estrategia de circulación y acceso al conocimiento
- Interpretación de términos de licencias en obras de terceros: qué se puede hacer y qué no
- Elección de opciones de licenciamiento para producciones propias
Módulo 3 – Modelos basados en licencias libres en el arte y la cultura
- Una cultura conectada: de cómo una red libre, abierta y distribuida beneficia a la cultura
- ¿Cómo pueden ayudar a los artistas las licencias libres?
- Ejemplos de emprendimientos culturales basados en licencias libres
- Financiamiento colectivo o crowdfunding

Metodología
Este es un curso online, masivo y abierto. Todo el proceso y los materiales están abiertos y accesibles libremente en Internet.
Cada módulo tiene una duración de dos semanas e incluye:
- Un post inicial como disparador publicado por las docentes para leer, comentar y discutir, donde se introduce la temática del módulo. Cada post será publicado de forma abierta en un blog, por lo que la participación es libre.
- Una videoconferencia en vivo, donde las docentes presentamos y los participantes plantean sus preguntas y comentarios a través de un chat. Se realizan a través de un canal de streaming abierto y quedan grabadas a disposición de todos.
- Una consigna de trabajo para los participantes que, además de leer y comentar, realizarán sus principales aportes posteando en sus propios blogs, en el marco del curso. Para realizar las consignas los participantes deberán tener un blog propio (o crearlo para el curso) y registrarlo en la inscripción al curso.
- Bibliografía: las docentes pondrán a disposición recursos de libre acceso para profundizar en los temas de cada módulo.

Aula virtual
En el aula virtual encontrarás toda la información necesaria para seguir el curso, el material para ver y descargar, así como el acceso a las actividades, todo organizado por módulos. No es necesario tener un usuario ni una contraseña, los materiales son abiertos y están disponibles a toda hora.

Comunicación
Durante el curso recibirás un newsletter periódico con todas las novedades y síntesis de las actividades del curso. Además, estaremos en constante diálogo a través de Twitter en el hashtag del curso #cursolibrebus

Equipo docente
- Beatriz Busaniche, licenciada en Comunicación Social de la Universidad Nacional de Rosario. Trabaja para la Fundación Vía Libre desde hace algunos años. Desde el 2011 es Public Leader de Creative Commons en Argentina. También es integrante y fundadora de Wikimedia Argentina. En relación al mundo académico, es docente de la Universidad de Buenos Aires en la carrera de Ciencias de la Comunicación, en Ciencias Sociales, Ayudante de Primera en el Taller de Datos, Cátedra Becerra y Titular de Cátedra del Seminario Copyright / Copyleft. Está terminando una maestría en Propiedad Intelectual en la FLACSO Argentina.
- Mariana Fossatti, directora y docente de Ártica – Centro Cultural 2.0. Socióloga egresada de la Universidad de la República (Uruguay) con una maestría en Sociedad y Desarrollo. Experta en la aplicación de las TIC y el e-learning en la cultura, la educación y las organizaciones sociales. Autora del e-book “Arte joven y cultura digital”. Paralelamente, investiga en artes visuales y desarrolla su propia obra, volcándose especialmente a las técnicas de collage y remix audiovisual.
- Evelin Heidel, estudiante de Letras y Bibliotecología en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires. Miembro de Fundación Vía Libre y de Wikimedia Argentina. Líder pública de Creative Commons Argentina. Trabaja en el programa de digitalización de la Facultad de Filosofía y Letras (UBA). Ayudante del seminario Copyright / Copyleft. Debates sobre el derecho de autor y el acceso a la cultura, en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA.
- Lila Pagola. Formada en artes visuales (fotografía 1993, grabado 1998), se desempeña actualmente como docente de nivel superior en diseño interactivo y fotografía. Desde 1997 produce, investiga y realiza actividades de gestión cultural en torno a las relaciones entre prácticas artísticas y cultura digital. Su trabajo en el área del arte y la tecnología se desarrolla principalmente en dos ejes: las prácticas artísticas en red en Latinoamérica (http://ludion.com.ar/) y la convergencia entre el
modelo del software libre, la cultura copyleft y la crítica a la noción de autoría desde las prácticas artísticas (http://www.culturarwx.net | http://www.nomade.org.ar/).

Certificados
Si registras tu blog al inscribirte y posteas en tu blog al menos dos artículos para las consignas de trabajo del curso, recibirás un certificado digital en formato pdf.

 Por consultas: contacto@articaonline.com